Y como bien dije en el post de League of Legends, ahora le toca el turno a Arcane, la serie de Riot basada en el mundo y los personajes de su juego insignia.
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Cosas varias que no supe categorizar.
Con el estreno de la serie Arcane (de la que pienso hablar una vez que termine), me pareció un buen momento para hablar del universo en el cual tiene base, League of Legends (y de su empresa, Riot Games). Habiendo cumplido 12 años en 2021, League of legends (LOL, para abreviar) se ha convertido en uno de los juegos (si no EL JUEGO) más influyentes de la última década. Y no digo esto desde el punto de vista de un jugador fanático, que piensa que el juego que le gusta a él es el mejor, sino que me baso en pruebas sencillas: es uno de los juegos más jugados y vistos a nivel mundial. En los últimos años (en realidad, algo así como en los últimos 7), pocas veces estuvo por debajo del top 10 (y, cuando ha sido desplazado, siempre ha logrado volver al top) de los más vistos en Twitch, principal plataforma de streaming de videojuegos. Y la verdad, es algo admirable, ya que es el único juego que se me viene a la mente que ha tenido soporte y relevancia real por 12 años (hay otros juegos que han durado muchísimo tiempo, como Warcraft, Starcraft, Age of Empire o Counter Strike, pero todos fueron dejados de lado por sus empresas, ya sea para crear secuelas o simplemente terminar ahí su franquicia hasta el momento).